¡COMAMOS LOCAL!¡COMAMOS LOCAL!
Elegir
alimentos locales significa conectarse con los ritmos estacionales de la
naturaleza en el lugar donde vives. Estos alimentos viajan una corta distancia
desde su producción hasta tu plato, llevando consigo no solo un sabor excepcional,
sino también un compromiso con el bienestar ambiental y comunitario.
Por qué los alimentos locales son importantes
- Los productos locales a menudo pasan de la granja a la mesa en un instante, conservando sus deliciosos sabores y valor nutricional.
- Comprar productos locales apoya a los agricultores y productores de tu área, fomentando una comunidad próspera y conectada.
- Distancias más cortas de viaje para los alimentos significan menos emisiones de transporte, lo que contribuye a un aire más limpio y un planeta más saludable. El alimento promedio viaja cientos, a veces miles, de millas para llegar a nuestros supermercados, emitiendo gases de efecto invernadero en cada milla. Los sistemas alimentarios locales ayudan a preservar tierras agrícolas y espacios verdes, proporcionando un hábitat para la vida silvestre y un respiro para los residentes.
- Gastar tus euros en alimentos locales circula dinero dentro de tu comunidad, impulsando las economías locales y creando empleos.
¿Sabías que los alimentos locales pueden ser mejores para tu salud? Con menos tiempo en tránsito o almacenamiento, se conservan los nutrientes, haciendo que esa manzana crujiente o ese tomate jugoso no solo sean más sabrosos, sino también más saludables.
Elegir productos locales apoya la biodiversidad, ya que los agricultores locales son más propensos a cultivar una amplia variedad de cultivos, promoviendo un ecosistema más saludable. Los estudios muestran que los mercados locales pueden tener casi el doble de variedades de frutas y verduras que los supermercados, lo que significa más nuevos sabores para que tu familia descubra.
Vuestras decisiones como padres pueden generar un cambio significativo. Al elegir alimentos locales, no solo estás ofreciendo a tu familia las comidas más frescas y sabrosas; les estás enseñando a valorar su entorno y comunidad. Es un acto simple que puede generar un impacto profundo en el mundo.
Cómo
incorporar alimentos locales: 
Explora los mercados de agricultores: Estos centros comunitarios son una puerta de entrada a las delicias estacionales y artesanales.
Únete a un programa CSA: Las acciones de Agricultura Sostenida por la Comunidad (CSA, por sus siglas en inglés) traen lo mejor de la temporada directamente a ti mientras apoyas a las granjas locales.
Lee las etiquetas: Busca indicadores de localidad en tu tienda de comestibles; a menudo, los artículos locales están destacados con orgullo.
Cultivemos juntos: Comienza un huerto familiar, incluso si es solo una maceta en la ventana, para enseñar a los niños sobre el cultivo de alimentos y los ecosistemas locales.